Manel se abraza con Markovic y Loreto tras marcar el primer gol del CD Logroñés frente al CD Leganés (3-1) el 27 de enero de 1996, tal día como hoy hace 26 años, en la jornada 22 de la Liga de Segunda División. Los aficionados lo celebran con alegría en las gradas, mientras que en los aparatos de radio de toda España se escucha un grito inconfundible: ¡goool en Las Gaunas! Es el recuerdo de una época feliz.

Es imposible de calcular la cantidad de veces que se ha podido repetir esa expresión en boca de los aficionados blanquirrojos a lo largo de la historia, reflejando un sentimiento que no se puede explicar. El primer gol en Las Gaunas lo marcó Ramón Castroviejo, que luego fue un prestigioso oftalmólogo, el 15 de junio de 1924 frente al equipo francés Vie Au Grand Air, mientras estaba enrolado en las filas del CD Logroño.

Desde el 15 de septiembre de 1940, el viejo campo fue testigo de muchos goles importantes para el Logroñés, entre los que habría que recordar el de Bescós que supuso el primer ascenso a Segunda el 18 de junio de 1950 o, mucho después, los de Sanz, Pita y Noly que condujeron a los blanquirrojos a Segunda B, Segunda y Primera en 1978, 1984 y 1987 en medio de la euforia local. Algunos siguen grabados en nuestra retina.

Qué decir del primer gol en Primera, obra de Adolfo el 6 de septiembre de 1987 ante el Athletic de Bilbao, o del número cien en la máxima categoría, que hizo Quique Setién. Pero, sin tener tanta trascendencia, cada uno de los anotados por los locales en casa fue un motivo de alegría, los marcaran Amantegui, Lotina o Manel. Parece mentira que con tan pocas palabras se pudiera decir tanto. ¡Goool en Las Gaunas!