Hoy ha fallecido, a los 92 años, Arsenio Iglesias: el entrenador con el que el RC Deportivo de La Coruña ascendió a Primera División en 1991, tras casi dos décadas en el pozo de Segunda; estuvo a punto de ganarle la Liga al FC Barcelona en 1994 y conquistó la Copa del Rey en 1995. Al conocer la muerte del artífice del ‘Superdépor’, me ha venido a la mente David Vidal, a quien metió en el fútbol profesional a los 17 años.

“Él fue el que me dio el empujón que necesitaba para hacerme futbolista”, contó a ‘La Voz de Galicia’ en 2016 el que fuera defensa central del CD Logroñés en Segunda B la temporada 1979-1980 y, luego, entrenador en Primera desde 1990 a 1993. Corría el año 1967 y acababa de dejar el Seminario Menor de Santiago de Compostela donde estudiaba, mientras que Arsenio Iglesias dirigía al Fabril Deportivo.

“Mi padre era pescador y mi hermano también. Y en un barco andaría yo, o me habría tragado el mar, si no hubiera sido por Arsenio y el balón”, declaró al diario ‘As’ en 2008. “Me esperaba el mar y yo le tenía pánico. Para huir de eso me presenté con un amigo a hacer una prueba con el Depor. Me mandaron que fuera a ver a un tal Arsenio. Solo habló mi amigo. ‘Dale unas botas al chaval’, le dijo al utillero”.

Años después de superar ese examen, en una charla que dio en La Coruña, dijo en tono de broma: “Arsenio engañó al Dépor fichando a un central de tan pocas condiciones como yo”. Por ahí estaba el míster y tomó la palabra: “Es verdad, pero tenía tanta ilusión... Probó durante un mes y pensé que podríamos sacar algo de aquel tío”. Y lo que sacó fue “un jugador vulgar”, según afirmó David Vidal de sí mismo en 2016.