El 30 de septiembre de 1978, el CD Logroñés ganó el X Trofeo de la Vendimia frente al Español (2-2) en los penaltis. Castel detuvo el quinto lanzamiento del rival, mientras que por nuestro equipo marcaron Maneiro, el argentino Iglesias, Hugo, Muñoz y Lotina. La Vendimiadora Mayor, Margarita Soria, hizo el saque de honor. Recuerdo aquel partido porque jugaron a prueba Manolo Jiménez, Juan y Tasio.

Jiménez estuvo probando aquí un mes y llegó a jugar cuatro partidos amistosos, pero fue descartado. Luego, se hizo famoso porque disputó 420 encuentros en Primera División enrolado en las filas del Sporting de Gijón y fue internacional con la Selección Española en tiempos de Santamaría. “Entonces jugaba en el filial del Sporting”, me cuenta desde Gijón, “y nos plantearon a Juan y a mí ir cedidos al Logroñés”.

“Hablamos con ellos”, continúa diciendo, “y Juan fichó y yo no”. El club desechó a Jiménez, pese al informe favorable que había elaborado Aloy. “Yo tenía 21 años, acababa de casarme y decidí volver al filial del Sporting para intentar dar el salto al primer equipo. Pensaba que así sería más fácil llegar y veo que la decisión que tomé fue acertada, aunque nunca se sabe qué hubiera ocurrido en caso contrario”.

El escogido no tuvo suerte. “Aloy no se portó bien conmigo”, me dice Juan desde Posada de Llanera (Asturias). “Al quinto partido me sustituyó y, cuando vino Arriarán y volví a entrar en el equipo, tuve la desgracia de romperme los dos meniscos contra el Ensidesa (1-0) a los 19 minutos”, el 29 de abril de 1979, en la 31ª jornada, “y ahí se fastidió todo. Me perdí lo que quedaba de temporada y pasé ocho meses en blanco”.