Santi Aragón jugó en el CD Logroñés la temporada 1989-1990, cedido por el Real Madrid CF cuando tenía 21 años, y aún guarda buenos recuerdos de esa época. “Fue un año estupendo, porque el Logroñés estuvo a punto de clasificarse para la UEFA; se quedó a dos puntos”, cuenta en una entrevista concedida al blog ‘Historias del Real Madrid’. “Fue un año que nos hizo crecer mucho a todos”. Hoy cumple 53 años.

Mediocentro de gran calidad, se formó en las categorías inferiores del Real Madrid y vino aquí en julio de 1989, tras media temporada en el RCD Espanyol, con el que solo disputó ocho partidos de Liga y bajó a Segunda División. “Se produce el traspaso de Ruggeri”, relata, “y nos mandan en paquete para allá. Vamos Vílchez, Maqueda, Rosagro y yo”. Se trata de su segunda experiencia en un equipo profesional de fútbol.  

“La verdad es que se hace un gran grupo de gente joven y de gente veterana”, continúa diciendo. “Allí coincidimos con Quique Setién, Manolo Sarabia, Alzamendi… Estaba como entrenador José Luis Romero”. En líneas generales, “el año fue muy bueno y con muchas experiencias, muy positivas todas. Éramos un buen grupo de jugadores en una ciudad pequeña, un equipo muy familiar, un equipo humilde…”

Aragón jugó 23 partidos con el CD Logroñés y marcó tres goles, siendo, además, internacional sub-21. “La verdad es que se hizo una gran temporada en Logroño”, la mejor de toda la historia del club, “y, de hecho, la recuerdan todavía”. A raíz de eso, fue repescado por el Real Madrid en verano de 1990 y se hizo famoso por el gol que metió desde el centro del campo ante el FC Barcelona en la Supercopa de España.