El CD Logroñés hizo realidad la temporada 1979-1980 una de las mayores aspiraciones de cualquier equipo de Segunda División B: eliminar de la Copa del Rey a un Primera como la UD Salamanca y cruzarse en los octavos de final con el Real Madrid CF, aunque fuera apeado. La prensa le dio “un notable alto en la Copa”, pero tuvo que conformarse con un “aprobado raso en la Liga”, al quedar el décimo.
El 14 de junio de 1987, el CD Logroñés culminó un sueño y, por primera vez en sus 47 años de historia, consiguió el ascenso a Primera División, tras ganar al Valencia CF por 1-0 en Las Gaunas en el penúltimo partido de la fase de promoción. “Un hito”, según la prensa, que remataba “un trabajo muy bien hecho por parte de todos”, en palabras del presidente Joaquín Negueruela, porque esa temporada todos dieron la talla.
La temporada 1988-1989 (la segunda del CD Logroñés en Primera División) estuvo marcada por la elección del bodeguero Marcos Eguizábal, de 69 años, como presidente del club. Tras ganar las elecciones al exvicepresidente Fernando Villamor por 266 votos de diferencia el 30 de mayo de 1988, llegó como un huracán, mostrándose como un dirigente osado y atrevido en un mundo desconocido para él.